miércoles, 30 de enero de 2013

Tenía que decírtelo

Siento un agradable cosquilleo y una enorme excitación al escuchar los primeros compases del nuevo single de Quique González. Es el adelanto de su próximo disco "Delantera Mítica" y ya cuento los días para poder tenerlo entre mis manos.

Soy un fiel seguidor de todo el cancionero del artista madrileño y creo sinceramente que su obra no envejece, que siempre sorprende aunque pasen los años, que siempre deja otra oportunidad abierta al oyente. No me canso de ninguno de sus discos y tal vez sean de los que más he escuchado, pero es que siempre ofrecen algo nuevo, algo que despierta lo más profundo, lo más sensible. Sé que el nuevo disco de Quique González volverá a estar en primera línea y no defraudará, sabiendo además que ha vuelto a grabar en Nashville bajo la producción del preciso y certero Brad Jones.

Con respecto a "Tenía que decírtelo" vuelve a dar en la diana. Es la canción que estábamos esperando para estos tiempos con olor a sucio y polvo entre las manos. Lanza disparos certeros y no deja pie en la letra a lecturas nimias: Huídas desesperadas "Los pájaros huyeron del nido usando pasaportes falsos"; falsas verdades que tiñen la realidad "Alguien juega a salvarte la vida con la estrategia de un predicador"; desesperación y vergüenza "Quién quiere abandonar el edificio ya, lo raro es no sentirse fuera de lugar".

Es la mejor canción que podíamos esperar en este momento de Quique González: directa, sin medias tintas, sin miedos. Y le acompaña un ritmo que golpetea y te lleva hasta el gran clímax final con esa guitarra desgarradora marcando un enorme e inspirado solo. El videoclip también es fantástico y está en perfecta consonancia con la letra y la descorazonadora realidad que nos narra el tema:
"Ya están aquí para cubrir el expediente, los presidentes de la desesperación. Ya están aquí con el cuchillo entre los dientes... Tenía que decírtelo".

Imprescindible. Revelador. Gigante.

martes, 29 de enero de 2013

El Amor después del Amor

Esta semana se publica en España (varios meses después de su lanzamiento oficial en Argentina) el nuevo disco de Fito Páez, una revisión en directo de su álbum más emblemático "El Amor después del Amor" en el vigésimo aniversario de su publicación.

Confieso mi infinita admiración por Fito Páez. Es un artista sin tapujos que se nos presenta siempre inquieto y dispuesto a sorprendernos con propuestas variopintas, a cada cual más interesante. Sin embargo Fito Páez es casi un desconocido en España. ¿Por qué un músico de este calibre es tan ninguneado en nuestro país? ¿Por qué un artista que ha definido el rock en castellano junto con algunos "grandes" de su país no goza siquiera de una reseña en nuestros periódicos ante el lanzamiento de un nuevo disco? Tal vez sea porque nuestro país no valora la cultura musical ni nada que huela a creación artística si no es gratis, o tal vez sea porque nos empeñamos en colgar etiquetas a algunos músicos que les marcan de por vida y que les llevan al anonimato forzado, no dejándonos ver todo el valor de los mismos.

Sí, Fito Páez se dio a conocer al gran público español gracias al lanzamiento a dúo con Joaquín Sabina de un gran disco llamado "Enemigos Íntimos" allá por el año 1998. Páez llevaba publicando discos en su país 15 años e incluso habían pasado ya 6 años desde el lanzamiento del fantástico "El Amor después del Amor" que, curiosamente, es el disco más vendido de la historia del rock argentino. Pero en España no se le había prestado atención, al igual que había pasado con enormes artistas como Charly García (aunque para mi sea demasiado excéntrico) o Luis Alberto Spinetta. La publicación del disco conjunto con Sabina le dio una gran oportunidad en nuestro país, pero las desafortunadas diferencias entre el tándem Páez-Sabina hicieron que se calificara al argentino como "el malo de la película" y tras un disco crucial para la carrera de ambos músicos, se ignoró a Fito y se abrazó con más fuerza todavía las propuestas que vendrían de la mano del de Úbeda. Soy un enamorado de la música de Joaquín Sabina, pero también soy fiel seguidor de Fito Páez y parece que eso en España es incompatible. Pues no, Sabina y Páez firmaron uno de los mejores discos para sus respectivas carreras y yo tengo que agradecer a este experimento conjunto mi afición por Fito Páez y por el rock argentino en general, al que me empecé a acercar a raíz de este momento.

Tras la publicación de "Enemigos Íntimos" llegaron con cuentagotas algunos de los discos de este artista a nuestro país como el progresivo "Abre", el festivo "Rey Sol" o el enérgico "Naturaleza Sangre", pero para sumergirme en su discografía anterior tuve que recurrir a internet o a encargos en las tiendas hasta hacerme con sus más que llamativos experimentos de los '80 y sus mágicos álbumes de los '90.

Con el paso de los años algunas estanterías de las tiendas especializadas de música tienen siempre algo de Páez, pero no se le hace ninguna justicia debido a que se han ignorado o retrasado en su publicación algunas de sus últimas joyas discográficas como "El Mundo cabe en una canción", "No sé si es Baires o Madrid" (y eso que era un directo grabado en la capital de nuestro país) o "Confía". Eso sí, Fito Páez respeta a sus seguidores españoles (y a los muchos argentinos que residen en nuestro país) y se acuerda de nosotros para seguir visitándonos en directo de vez en cuando y ofrecer conciertos mayúsculos en intensidad y emoción. Recuerdo con especial cariño aquella actuación íntima que disfrutamos todos los presentes en el Teatro Principal zaragozano hace casi dos años, dentro de su gira "Solo piano", aquel concierto mucho más enérgico en el escenario de Lanuza del Festival Pirineos Sur 2010 para presentar su último gran disco "Confía", o aquella lejana actuación rockera y desenfrenada de hace ya casi 10 años en la Sala Oasis de la capital aragonesa... la primera vez que presencié emocionado el directo del rosarino.

Ahora Fito Páez celebra por todo lo alto el vigésimo aniversario de su obra más reconocida y merece la pena revisitarla (tal como se nos presenta en directo) y seguir prestando atención a este artista mayúsculo, cuya energía, pasión, precisión, meticulosidad y mucho corazón están siempre invitados en sus más que interesantes propuestas.

domingo, 20 de enero de 2013

Dakar

En este blog me veréis pocas veces hablando de deporte, pero una prueba como el Dakar bien se merece una entrada.

Soy aficcionado del motor, aunque no soy nada experto, pero considero que el Rally Dakar es todo un desafío. No solo por lo impresionante de sus imágenes y sus etapas de vértigo, sino porque es algo más que un deporte: es una prueba de resistencia, de sacrificio, de honestidad y respeto por el contrario, de solidaridad, de mucho más que kilómetros; es más que una gran meta para todos sus competidores.

Una vez más he podido disfrutar y sorprenderme con el seguimiento de este Rally que se disputa desde hace algunos años entre los Andes y el desierto de Atacama, en América del Sur. De nuevo ha sido toda una experiencia, y eso que lo he seguido desde casa. Gracias por hacerme disfrutar de tan buenos momentos y por engancharme a la magia de la pasión y el sacrificio, de la entrega y tesón sin límites, de la dureza de las barreras del día a día y de sus grandes recompensas...

Esta noche podré disfrutar de la ceremonia del podio del Dakar desde Santiago de Chile y quitarme el sombrero ante Nani Roma, Xavi Foj, Laia Sanz, Joan Pedrero, Joan Barreda, Marc Guash, Paco Martínez y todos los que nos demuestran que vale la pena luchar para conseguir todas nuestras metas.

Hasta el año que viene.



martes, 15 de enero de 2013

The Next Day

Estos días se habla mucho de David Bowie y de su regreso a la escena musical después de casi diez años de retiro: una gran noticia para todos los que amamos la música.

Nunca he sido fiel seguidor del “duque blanco” pero desde hace un tiempo parecía claro que tras los achaques de salud sufridos en 2004, el músico inglés se había retirado definitivamente. Así parecía confirmarlo su actual aspecto de “sereno jubilado” y su ausencia en las ceremonias de apertura y clausura de los juegos olímpicos de Londres, donde se le rindió homenaje y fue uno de los ausentes más destacados.
La vuelta con nuevo álbum de Bowie me parece un enorme acierto cuando ya casi nadie contaba con él. En uno de los momentos más duros para la música reaparece uno de los grandes para decirnos que hay que seguir adelante, que hay que dar un vuelco al pasado y pensar en todo lo que está por venir. De hecho su nuevo disco se llamará “The Next Day” y su portada lo dice todo: La carátula de uno de sus discos más personales y en su mejor momento creativo “Heroes” pero con ese título borrado y con un simple cuadro en blanco que tapa casi la totalidad de la carátula y que anuncia claramente el título del nuevo disco “The Next Day”. ¿Arriesgado? Bowie siempre lo ha sido. Tal vez sea una provocación o una crítica al cambio de rumbo de la sociedad desde que publicase ese disco en su etapa de Berlín en 1977, o simplemente un paso adelante dejando atrás lo aprendido y creyendo en las nuevas oportunidades, en los cambios a pesar de las dificultades, en el riesgo, sin el que no hay creación honesta.
Simplemente me encanta todo lo que está dando de sí la reaparición de Bowie y me inquieta saber qué será de su nueva apuesta, a pesar de considerarme a estas alturas un neófito de su música y de su universo. Puedo decir que siempre me han llamado la atención algunas de sus más destacadas canciones como “Ziggy Stardust” o “Heroes” (un tema imprescindible para todo melómano que se precie) y que me atraparon algunas de sus propuestas más variopintas de los años 90, como la electrónica “Hallo Spaceboy” o la delicada “Thursday’s child”. Aunque si he de quedarme con una sola cosa de su extensa discografía lo haría con la edición de su última gira “A Reality Tour 2004” que nos muestra toda su fuerza con algunos de sus temas más representativos y se gana el respeto merecidísimo de un artista de los que han marcado para siempre la historia de la música del siglo XX.
Por el momento esperaremos a ver qué vendrá “el próximo día”. 

martes, 8 de enero de 2013

Feliz 2013

Ya sé que es algo tarde, pero lo primero que tengo que hacer es felicitaros a todos este nuevo año 2013 y desear lo mejor para un año que, aunque pinta difícil, tiene que venir cargado de esperanza y buenos momentos.

Durante estos días de vacaciones de Navidad he desconectado totalmente del blog, pero, como cada año, intento disfrutar al máximo de estos días y comenzar de nuevo con las pilas cargadas. En estas navidades he podido relajarme y empaparme de “buen” cine y, como no, de mucha música.

He pasado los últimos días del 2012 y los primeros del 2013 entre discos de Mark Knopfler, Jack White, M83, Per Gessle, The Black Keys o Bob Dylan, y he podido disfrutar de algunas películas que me han atrapado por una u otra razón: desde la más terrenal (y eso que tiene mucho de misticismo) de Peter Jackson “The Lovely Bones”, al siempre sorprendente Rodrigo Cortés y su último film “Luces Rojas”, pasando por la magia del Bond más humano en “Skyfall”. Además, como hay que empezar el año con buen pie, los Reyes Magos me han sorprendido con los últimos discos de Keane (“Strangeland”), The Killers (“Battle Born”) y M Clan (“Arenas Movedizas”), todos ellos enormes discos y de entre mis favoritos del año que dejamos atrás.
También he empezado el año haciéndome con las entradas para los conciertos que darán en Zaragoza Ocean Colour Scene y Quique González. De los primeros he disfrutado varias veces en directo en Zaragoza, aunque han estado ausentes de estas tierras aragonesas desde que en 2001 nos regalaran dos grandes conciertos. Ahora vuelven con un nuevo disco que seguro seguirá la línea de su siempre cuidado ritmo y su melodía puramente “british”. Del segundo tengo poco que decir y mucho a la vez: es una de mis grandes pasiones y nunca defrauda. El artista rock más íntegro del panorama nacional que presentará el que será su disco del 2013 “Delantera mítica”. Para ambos conciertos habrá que esperar hasta abril, pero la ilusión por disfrutar de ellos me mantendrá despierto.

Solo hay que esperar que este año esté también cargado de buenas vibraciones para todos. Seguiremos buscando…